¿Has notado un estancamiento en la velocidad de tu carrera? Es normal que cuando empieces a entrenar tu velocidad vaya mejorando de forma progresiva, y que llegado a cierto punto ésta se estanque. No te pierdas los siguientes trucos para perfeccionar tu técnica y mejorar la velocidad en la carrera.
Acorta tus carreras
Ten en cuenta que si te acostumbras a salir un tiempo determinado, y correr a una velocidad constante, mejorarás la resistencia, pero apenas mejorarás la velocidad.
Cambia alguna de las sesiones por una carrera más corta tanto en tiempo como en distancia. Experimentarás menos cansancio, y el hecho de recorrer una distancia mejor te animará a ir más deprisa. Intenta superar tus pulsaciones habituales el día que hagas esta carrera más corta.
Entrenamiento interválico
Una vez que te hayas acostumbrado a este nuevo ritmo comienza con el entrenamiento interválico, la clave para aumentar la velocidad en carrera. Este tipo de entrenamiento hará que tu cuerpo produzca una mayor cantidad de ácido láctico y tu cuerpo se verá forzado a aumentar la capacidad de eliminación del mismo, aumentando así tu capacidad de respuesta y tu rendimiento.
Comienza dividiendo tu “carrera corta” en varios tramos separados por descansos. Si por ejemplo, la carrera es de 20 minutos, puedes dividirla en 6 intervalos de 2 minutos, con 2 minutos de descanso entre tramo y tramo. Es esencial que en estos tramos tu ritmo sea más intenso al habitual; el objetivo es obligar a tu cuerpo a satisfacer demandas muy altas de energía en un corto periodo de tiempo. Así, estarás acostumbrado a trabajar con unas exigencias mayores que las de la competición.
A medida que vayas dominando esta técnica, puedes ir aumentando los tramos o ir reduciendo el tiempo de descanso.
Combina estas sesiones más intensas con descansos, o trotes suaves para evitar lesiones.
Entrena en cuesta
Si entrenas en cuesta añadirás esfuerzo y trabajarás de forma más intensa todos los músculos de la pierna. Correr en cuesta es una de las mejores alternativas para optimizar tu zancada y perder peso, ya que las exigencias que conlleva son mayores que las de correr en llano.
Aunque cierta inclinación de la cintura hacia delante es inevitable, intenta que esta sea la mínima posible, para no modificar tu centro de gravedad y lastrar la capacidad de despegue de tus pies. La cabeza debe permanecer siempre erguida y con la frente mirando hacia delante para que no sufran tus cervicales.
Si realizas además un entrenamiento interválico, el resultado será inmejorable.
Recuerda que estamos disponibles en Bulevip.com el 911 309 808 en nuestros Whatsapp 685 922 554 o en info@bulevip.com para cualquier consulta que tengas