La calistenia es un sistema de entrenamiento que da prioridad a trabajar la totalidad de los músculos del cuerpo de manera equilibrada, frente a ganar potencia o resistencia, por lo que es el método ideal para aquellos que busquen definición. ¿Sabes cuáles son los pilares de este entrenamiento?
La calistenia es un sistema con el que se trabajan los principales grupos musculares ayudándonos únicamente del peso de nuestro propio cuerpo. Aunque algunas variantes de los ejercicios pueden hacerse con pesas, no es lo habitual, por lo que muchos se animan a salir del gimnasio y entrenar en casa o incluso en la calle.
El objetivo principal de la calistenia es ganar agilidad y flexibilidad, a la vez que definir, fortalecer articulaciones y corregir las malas posturas. Este método, que puede utilizarse como entrenamiento principal o complementario, es ideal si buscas definición o si ya estás en forma y simplemente buscar mantenimiento.
Ejercicios básicos
Este entrenamiento se basa en 6 ejercicios calisténicos básicos, de los que surgen múltiples variantes; la flexión, la sentadilla, la dominada, los puentes y la parada de manos o handstand. Cada uno de estos ejercicios trabaja uno de los principales grupos musculares del cuerpo, de manera que el trabajo sea uniforme.
Una vez que se dominan estos ejercicios se comienza a hacer progresiones de los mismos para añadir dificultad; por ejemplo, del ejercicio base de las flexiones, podemos pasar a la progresión de hacer flexiones alternando brazos, flexiones sobre una superficie inclinada etc.
No es recomendable pasar a una progresión hasta que no se domine totalmente el ejercicio base, la que la técnica es primordial para que este ejercicio sea efectivo. De igual modo, no es recomendable entrenar hasta el agotamiento en este método; es preferible entrenar a un nivel de intensidad moderado, pero con una frecuencia alta.