Muchos no conciben una rutina de musculación sin llegar al fallo muscular, mientras que otros optan por utilizar este método de forma esporádica. Resolvemos tus dudas sobre esta controvertida disciplina.
En qué consiste
El fallo muscular es un método que consiste en hacer repeticiones hasta que tus músculos, literalmente, no puedan más. El fin de este tipo de entrenamiento es garantizar que has llevado a cabo el ejercicio con la máxima intensidad posible, por lo que es un método muy común entre culturistas.
Para esto es hay que aumentar el peso del entrenamiento, bajar el número de series, e incluso reducir el tiempo de descanso hasta los 45-60”.
Pros
- Este tipo de entrenamiento reduce la posibilidad de estancarse, ya que garantiza que tus músculos trabajen siempre a la máxima intensidad posible.
- Utilizado correctamente, es un método muy eficaz para ganar volumen.
Contras
- Es muy agresivo contra los músculos, requiere un calentamiento muy exhaustivo y puede llegar a provocar lesiones, sobre todo en el caso de principiantes.
- En algunos casos se ha comprobado que abusar del fallo muscular, no hace que tus músculos crezcan, sino todo lo contrario.
- No es recomendable practicar este tipo de entrenamiento sólo; tener un compañero cerca que te ayude con las pesas en el momento de llegar al fallo muscular, para minimizar el riesgo de accidente, especialmente en ejercicios como las sentadillas o
En conclusión: Fallo muscular ¿Sí o no?
Lo ideal es entrenar el fallo muscular sin abusar y teniendo en cuenta algunas consideraciones:
- No es la práctica más adecuada si eres principiante, o si llevas un largo periodo sin entrenar.
- Respeta un descanso de 24-48 horas
- Combina el fallo muscular con otras sesiones menos intensas para evitar el sobreentrenamiento. Una práctica muy extendida es la de reservar el fallo muscular en para la última o penúltima serie.
Y tú ¿Qué técnica prefieres? ¿Crees que el fallo muscular es la técnica más efectiva para ganar volumen?