El verano está a la vuelta de la esquina y muchos os ponéis manos a la obra con la dieta, pero… ¡Nadie dijo que fuera fácil! Hoy os dejamos unos pequeños trucos que os ayudarán a lograr vuestros objetivos.
1 Haz una lista de la compra
Planifica tu dieta de forma semanal y a continuación haz una lista detalla de los ingredientes que vas a necesitar. Ve al supermercado con la lista que has elaborado y no te salgas de ella.
Las personas que acuden a comprar sin una lista cerrada son un blanco fácil para las técnicas de marketing; ten en cuenta que cada detalle de un supermecado están diseñado para empujarte a comprar. Si acudes a la compra sin un objetivo claro, es muy probable que acabes incluyendo en tu carrito algún producto que no necesitas, probablemente comida basura, o algún otro producto de bajo precio que suelen colocarse junto a la cola de la caja registradora, favoreciendo las compras por impulso.
2 Come más despacio
Come tranquilidad y mastica cada bocado en torno a unos 20 segundos. Cuando tu estómago se sacia envía una señal de aviso al cerebro, el problema es que esta señal no es inmediata; tarda en procesarse unos 20 minutos. Así, las personas que comen demasiado rápido, corren el riesgo de continuar comiendo cuando en realidad ya están llenos, excediéndose en la cantidad.
3 Evita los alimentos en formato líquido
Recientes estudios muestran que el deseo de comer es mayor en aquellos individuos que consumen gran parte de las calorías en su dieta en formato líquido, a aquellos que consumen la misma cantidad en sólido.
Si haces deporte regularmente, puedes continuar tomando tus suplementos pre-entreno y post-entreno líquidos como de costumbre, pero si tu dieta incluye algún sustitutivo líquido y ves que no calma tu ansiedad, no dudes en buscar otro alimento sólido.
4 Concéntrate mientras comes
Si realizas otra actividad mientras comes, como por ejemplo, ver la televisión o jugar al ordenador, aumentan las probabilidades de que consumas una mayor cantidad de comida y bebida. Si tu principal foco de atención no es la comida, sufrirás una leve falta de conciencia sobre cuál es la cantidad real de alimento que estás tomando. Además, recordarás con menor intensidad el hecho de haber comido, haciendo que la sensación de hambre vuelva con mayor rapidez.
5 Paciencia y mucho positivismo
Hacer dieta no es una tarea sencilla, por lo que debes evitar añadirte presión extra en estos casos. Evita situaciones estresantes en otros ámbitos, como el trabajo o tu vida personal que pueden llevarte a la frustración.
Aléjate lo más posible de alimentos prohibidos, por ejemplo, evitando pasar por la pastelería que hay de camino a tu casa. Estos pequeños detalles te generarán ansiedad de manera inconsciente.
Y recuerda, no existen los milagros, es necesario poner mucha fuerza de voluntad y complementar la dieta con ejercicio. Si necesitáis asesoramiento sobre alguno de nuestros productos de control de peso no dudéis en contactar con nosotros en el 911 309 808 , en nuestro Whatsapp 685 922 554 o en info@bulevip.com