Inevitablemente, muchas personas aún asocian la dieta con la pérdida de peso y la realidad es bien distinta; existen un sinfín de dietas con objetivos diferentes al de adelgazar. La elección de uno u otro tipo dependerá del estilo de vida de cada persona, su salud, y sus objetivos. Para ayudarte a elegir cuál es la más adecuada para ti, hoy hablaremos sobre una clasificación básica que debe ser tu punto de partida; la clasificación de las dietas en función de las calorías aportadas.
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¿Qué es una dieta?
Antes de comenzar a hablar de sus variantes, es conveniente concretar de qué hablamos cuándo nos referimos a dieta. Una dieta es el conjunto de nutrientes que aportamos a nuestro organismo a través de los alimentos. Así, nuestra dieta define nuestro estilo de vida y tiene una relación directa con nuestro estado de salud.
¿Qué tipos de dietas existen?
Seguro que has oído hablar de la dieta Dukan, la paleo, la mediterranéa, la keto… ¡Existen miles de dietas! Hoy hablaremos sobre los tipos de dietas que existen en función de las calorías aportadas, una clasificación muy sencilla y de gran utilidad para ayudarte a identificar los planes más adecuados para ti.
Dietas hipocalóricas
Las dietas hipocalóricas son aquellas dietas que aportan un menor número de calorías del que el cuerpo necesita, con el fin de perder peso. Las dietas hipocalóricas son las conocidas como dietas para adelgazar, o dietas de pérdida de peso. Estas dietas deben ser cuidadosamente diseñadas, consiguiendo un reparto equilibrado de macronutrientes (es decir, proteínas, grasas e hidratos) y micronutrientes (vitaminas y minerales) y no provocar ningún tipo de déficit.
Entre las variantes más conocidas de las dietas hipocalóricas destacamos las dietas bajas en hidratos de carbono, bajas en grasas, proteicas, o bajas en calorías.
Dietas hipercalóricas
Las dietas hipercalóricas son aquellas que te aportan un aporte de calorías por encima de tu metabolismo basal con el fin de ganar peso. Estas dietas son recomendables para personas con un metabolismo rápido y tendencia a adelgazar, así como para deportistas que buscan ganancia muscular, ya que es necesario crear un superávit calórico para poder construir músculo.
Al igual que en el caso de las hipocalóricas, estas dietas deben estar debidamente planificadas para conseguir una ganancia de peso saludable, en la que no se disparen las grasas.
Dietas normocalóricas
Las dietas normocalóricas o de mantenimiento son aquellas que te aportan una cantidad de calorías similar a las que tu cuerpo necesita, con el objetivo de mantener tu peso. Estas dietas son recomendables para personas que han alcanzado su peso ideal y quieren mantenerlo de manera saludable, o para aquellas personas que acaban de finalizar una dieta de pérdida de peso y quiere evitar el efecto rebote.
¿Qué dieta es la mejor?
Como ya sospechabas, la respuesta depende de tu condición física y tus objetivos. Una vez hayas identificado tus objetivos, podrás decidir entre una dieta hipocalórica, hipercalórica o normocalórica y diseñar una dieta específica partiendo de esta base. Siempre es recomendable acudir a un profesional para que te ayude a diseñar una dieta saludable y efectiva, y haga un seguimiento de la misma.
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